Ediciones Atlantis presenta Zujaira, una novela urbana ambientada en la localidad granadina con el mismo nombre, escrita por Marcos Collura. "Una novela corta que trata de reflexionar sobre la vida como concepto político, con toques de ironía, sátira y tragedia".
¿Cómo surgió la idea para escribir esta novela?
La idea surgió hace años. Yo estudiaba literatura comparada y con los compañeros de clase solíamos hacer discusiones sobre personajes probables de novela. De ahí fui sacando la mayoría de los personajes de la novela. Lo difícil era imbricarlos a todos en varias tramas que se fueran entrelazando, todo ello con un sustrato de reflexión sobre la vida como concepto político. Abandoné diversas arquitecturas posibles y justo en mayo de este 2018 decidí darle una redacción final.
¿Fuiste testigo directo de los hechos que se narran en Zujaira?
Zujaira es ante todo una historia de ficción muy bien camuflada en verdades autobiográficas. La mayoría de los personajes son inventados, las tramas nunca ocurrieron, ni siquiera yo era exactamente como me describo. Fui testigo de la decepción que la victoria de Aznar supuso en la generación de mis abuelos y padres, pero eso es solo la atmósfera de la novela. Soy un fanático de entreverar historias reales con ficciones.
¿Cuánto tiempo te ha llevado darle forma a aquella primera idea?
La forma definitiva, la redacción, surgió a finales de abril de 2018 y la terminé tres días después de la moción de censura que proclamó a Pedro Sánchez presidente. La arquitectura estaba ya muy trabajada, pensada y perfilada, todo fue saliendo muy fácil
¿Qué razones daría a un lector que esté buscando lectura para elegir su novela?
Creo que es una buena historia, con muchas sorpresas en diferentes puntos de su trazado y con un sustrato de pensamiento bastante denso. Además se lee fácil y rápido.
¿Cómo influye la política en la trama de la novela?
Todas las tramas de la novela tienen como muleta principal la política. La política en tanto que es acción y pensamiento, y su fijación en los modos de hacer política, desde lo institucional hasta las organizaciones y partidos. La idea era superar los prejuicios desde los cuales se habla de las diferentes ideologías, y capturar posibilidades políticas poco tenidas en cuenta hasta el momento
¿Hay alguna anécdota que quieras compartir con los lectores?
Justo el 22 de abril, después de un fracaso enorme de taquilla en el teatro Isabel La Catolica, decidí que era la hora de escribir esta historia que hablaba del éxito y el fracaso. Lo hacía por transitar ese fracaso exorcizando los demonios que pudiera haber creado en mí. Curiosamente, un puñado de meses después estoy celebrando su publicación, ergo me da la razón de seguir manteniendo la tesis del "fracaso como logro".
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