Ediciones Atlantis publica 'La verdad está en el interior', una novela policiaca escrita por el autor Eugenio Rey que destaca por su gran calidad de ejecución, en un estilo sobrio pero altamente expeditivo. Una obra breve altamente interesante, no solamente por su trama, sino por el trasfondo personal que empapa todo el libro.
¿Qué te impulsa a escribir?
Yo creo que, como todo en la vida, el amor. El amor a mis padres, me impulsó a que les regalase mi primera creación: Lib…, un libro único, ilustrado por 200 ilustradores altruistas, que narra sus vidas y que les entregué en sus bodas de oro en el 2007. Luego, de ese amor, surgieron otros amores. El amor a la literatura hizo que, tras años y años devorando historias, me sentara, al fin, para disfrutar también escribiéndolas. El amor a mis hijos, que hizo que les escribiera cuentos cuando eran niños y en los que participaban ellos también. El amor propio (¿por qué no?), que me empujó a que me probara en el difícil ruedo de los premios literarios. Y, por último, el más importante de todos: el amor a Dios que, tras mi conversión profunda en el 2012, me empuja día a día exprimir al máximo los dones que Él me ha regalado, entre los que creo haber descubierto el de contar historias, unas reales y otras inventadas.
¿Cómo ha sido el proceso creativo de esta novela? ¿Hay alguna parte que te haya costado más o algún momento en el que sentiste que estabas estancado?
La idea germinal surgió de un pequeño boceto de guión que mi hijo Miguel Ángel escribió con la idea casi imposible de llevarlo algún día al cine. Me gustó mucho y, poco a poco, basándome en ese boceto de guión, fueron surgiendo los personajes y la trama. El proceso de mi escritura consiste en escribir, leer lo escrito, suprimir, volver a escribir, volver a suprimir lo que no me gusta… y así, una y otra vez. Intento que cada personaje hable y actúe de forma diferente para conseguir dotarles de la máxima “realidad” posible. Respecto a la trama, lo más complicado en este tipo de novela corta, al menos para mí, es buscar el equilibrio perfecto entre contar demasiado y contar demasiado poco. Hay que conseguir que el lector medio entienda todo con las mínimas palabras posibles pero, al mismo tiempo, hacer que se esfuerce un poco ligando unas cosas con otras. Eso fue lo más difícil y ahí es donde necesité de un buen lector ajeno a ti para cambiar lo que haya que cambiar y suprimir lo que haya que suprimir. Y en esa tarea me ayudó mucho mi esposa Marisa.
La verdad está en el interior es una novela policíaca… ¿Qué la hace diferente al resto?
Creo que el sentido del humor de la pareja protagonista, aunque también otros personajes aportan bastante humor. Luego, el peso del pasado está presente en cada momento, valga el juego de palabras. También me parece original que uno de los personajes sea una nana y que esa nana se vista de gala al final de la novela. Por último, la importancia de los objetos en la novela. La cruz de Jack, el pen-drive del periodista, el reloj de bolsillo del padre de Ramírez y, por supuesto, los chupa-chups de Niño y Cayla, a su manera, son personajes fundamentales de la novela. También destacaría los constantes guiños al cine que hacen los personajes, sobre todo Niño.
¿Tienes alguna manía a la hora de trabajar?
Más que manía, suelo arroparme con el silencio para poder escribir. El silencio ayuda mucho para poder escuchar las voces propias de los personajes. Otra “manía” es que releo constantemente lo que escribo y aplico bastante la tijera.
¿Qué libro has leído, releído y sin duda, volverás a leer?
Libro divino: la Sagrada Biblia, por supuesto, es un pozo inagotable de sabiduría para el no creyente y la Palabra de Dios para el creyente, como yo. Respecto a los libros humanos, ocupa un lugar único el Quijote. A bastante distancia de él, clásicos como Los miserables, El conde de Montecristo y Fortunata y Jacinta. Luego, algo más lejos: El Señor de los anillos, It, Crónicas del Señor de la guerra, Ni un pelo de tonto… Y, por supuesto, algunos cuentos como La noche boca arriba o La estrella sobre el bosque.
¿Estás escribiendo ahora algo o tienes algún libro en mente?
Ahora mismo estoy con una novela corta titulada “El suicida compulsivo” perteneciente al género de humor negro. Llevo escrito la tercera parte y no sé si se quedará en relato o crecerá hasta novela corta. Dios dirá... Luego, tengo en proyecto una colección de relatos cortos costumbristas, “extraídos” de Lib…, el libro que regalé a mis padres para sus bodas de oro. También tengo casi terminado una especie de divertimento titulado “Humorario, genierías y chorradas”. Y, en pañales, un homenaje al cine con un análisis cristiano de unas 200 películas, más o menos. También me gustaría narrar otra “aventura” policíaca de la pareja que forman Ramírez y Niño porque me da la impresión que no han dicho su última palabra. Y, por último, tengo 2 proyectos más (pero eso ya son palabras mayores) que, si Dios quiere, saldrán a la luz a finales de esta década o a principios de la siguiente. De momento, solo están en mi corazón.
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