1.- A pesar de la juventud, poco a poco te estás labrando una considerable y muy variada trayectoria literaria. ¿Qué van a encontrar los lectores en tu nuevo libro ‘Ten mucho cuidado con lo que deseas’?
En primer lugar, gracias por reconocer mi trayectoria. Todos buscamos un arte para buscar nuestra propia referencia y el mío, sin duda, es la literatura. “Ten mucho cuidado con lo que deseas” es bastante original. Es una historia de intriga, de género negro pero a la vez de comedia romántica. Contiene mucha reivindicación social y muchos toques frescos del mundo de las celebridades y la moda. Lo que empezó como un planteamiento de una historia fresca y ligera sobre una temática actual en el ambiente de las redes sociales y el famoseo fue evolucionando hacia el tipo thriller. No faltan las reflexiones filosóficas explorando, principalmente, el pilar sobre el que gira toda la historia: ¿qué estarías dispuesto a pagar por cumplir tus sueños? Lo importante es que saquen ellos de lo que escribo puesto que yo pongo las palabras y sentimientos pero es el lector quien les da forma en su mente.
2.- Una de las cosas que más llaman la atención de tus libros son las propias historias en sí, tu capacidad de inventiva y gran imaginación. ¿Cómo surgen las ideas? ¿Cuál es tu método, si es que lo hay?
Para mí escribir es como una ventana a nuevos mundos, nuevas historias que abarcan mucho de nuestra realidad pero que a la vez son viajes ficticios a través de temáticas actuales mediante la ficción. Escribir me absorbe y me lleva a nuevas experiencias que combinan fantasía y posibles realidades. Cuando más productiva he sido era cuando más lo necesitaba, cuando el mundo se pintaba más gris yo trataba de darle color con una obra literaria. Por otro lado, es cierto que he tocado varios géneros y cambiado drásticamente de temáticas en mis historias.
Por otro lado, no hay un modo claro de saber cómo surgen las ideas. Diría que elijo las temáticas según tópicos que me entretienen, me hacen reflexionar y me gusta inmiscuirme en ellos poniendo mi granito de arena pero siempre siguiendo un camino trazado de ética, sobreponiendo mis valores y tratando de que mis historias sigan el rumbo ficticio que sigan y alcen la voz sobre temáticas sociales. Es un ejercicio de empatía con los personajes, las historias y, al mismo tiempo, con el lector final.
Mi principal método para escribir una novela es tener una tormenta de ideas o brainstorming y luego ir ordenándolas en un esquema para el manuscrito entero. Después, por cada capítulo suelo hacer nuevos esquemas y anotaciones que más adelante se plasmarán en el resultado final. Todo desde un sofá o cama con mis reglas en mi ordenador con total libertad creativa.
3.- En esta novela te acercas al género negro. ¿Qué es lo que más te atrae de él?
Es muy interesante jugar con el género negro. Da lugar a crear historias que puedan sorprender al lector, como un juego de muñecas rusas en el que diferentes tramas y sus giros van desgranando la historia de manera que engancha y atrae. Nada es lo que parece. Escribir género negro es como un juego emocionante.
Lo que más me atrajo de empezar escribir este género fue la manera en la que se podían combinar mi método de escritura y planificación con la creación de la historia y lo divertido que podía ser elaborar una novela de estas características intentando cumplir las expectativas del lector.
4.- ¿Qué ingredientes, en tu opinión, son necesarios para que una novela funcione?
No creo que exista una fórmula mágica. Es más bien estar en el momento adecuado y en el sitio adecuado. Hay mucho talento en el mundo de la literatura y no solamente en la comercializada, también hay grandes escritores que no se han mostrado al público. Visto esto, existe mucha competencia en materia de ventas y que una novela funcione ya no depende solo de su calidad, si no de otros factores como la promoción y el marketing. No obstante, a mi parecer una novela siempre tiene que atrapar al lector y llevarle a otros mundos de manera convincente, como si se embarcara en un viaje real a otra historia. Sin embargo, principalmente que una novela funcione es cuestión sobre todo de suerte.
5.- Mantienes un ritmo alto de creatividad. ¿Cuánto tiempo aproximadamente te lleva escribir un libro?
Depende del momento de mi vida. Pero sí es cierto que en cuanto tengo una trama que me apasione en mente las ideas van llegando rápido y sigo un ritmo de escritura muy veloz porque las historias que escribo son historias que me apasionan. Después de la investigación y planificación sigo un ritmo de redactar varias páginas diarias. Habitualmente acabo una novela en cuestión de meses, pero para ello tengo que estar muy sumergida en la historia. Cuando acabo una novela es cuestión de la suerte que se me ocurra otra idea.
6.- ¿En qué género te sientes más cómoda? ¿Cómo lectora tienes alguno favorito?
Hasta hace pocos años, el género en el que me sentía más cómoda escribiendo era en el fantástico, quizá debido a mi juventud y mis influencias de la adolescencia. Ahora estoy disfrutando el género tipo thriller mezclado con toques de comedia romántica. Me gusta explorar diferentes géneros puesto que también he escrito poesía y teatro. No creo que haya un motivo claro por el que estancarse en un género. Hay una larga lista de escritores en la historia muy polifacéticos literariamente hablando, aunque sí es cierto que en el mercado editorial actual están aflorando escritores famosos que se centran en un solo género. No es mi caso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario